viernes, 8 de octubre de 2010

A los verdaderos guerreros.

Estoy traspasada por algo que acabo de leer y no sé definir muy bien lo que siento: mucha tristeza, desde luego, por el tema tratado, y admiración por la maestría de la escritora , y más tristeza porque se me ha mostrado un mundo al que nunca accederé, como quien dibuja con un lápiz una ventana en un muro, y la ventana de repente cobra vida y se abre y ves más allá un río de plata brillando al sol, y unas colinas solitarias, y un fondo de montañas, y sabes que nunca podrás llegar hasta allí, que tendrás que limitarte a admirarlo en la distancia mientras la ventana permanezca como está.

Hay personas que nacen con el don de hacernos viajar, de obligarnos a salir de nosotros mismos para descubrirnos mundo nuevos, de hacernos soñar, llorar, reír, morir de tristeza o de miedo, de rabia o de angustia, de alegría o maravilla sin levantarnos del sofá, sin movernos de la silla. Algunos lo hacen con dibujos, otros con sonidos, otros con imágenes en movimiento, y algunos más con palabras. Son los artistas.

Cuando alguna de estas personas consigue traspasar mi coraza y tocarme dentro, me sorprendo de que no sean veneradas y ensalzadas como realmente merecen. Porque personas así nos hacen un regalo inestimable que no se puede comprar, no se puede imitar, solo viene dado de su mano. Son las personas que hacen que el mundo avance sólo porque son capaces de imaginar (y transmitir) lo que le resto no podemos vislumbrar, nos ponen sentimientos, ideas, visiones nuevas en la cabeza y gracias a ellos, el mundo cambia, se vuelve humano, sensible, hermoso, vivible.

Y sin embargo muchas de estas personas siguen viviendo vidas pequeñitas, dudando muchas de ellas de su propia capacidad para crear universos de la nada, sintiéndose a menudo indignos o defectuosos porque pueden ver lo que otros no ven, porque no tienen trabajos materiales, entendibles, porque sienten demasiado y eso causa desasosiego en quien mira, porque no son normales.

A todos ellos, que nunca leerán esto, les mando mi más profundo, sincero y sentido agradecimiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario